Los nuevos medios on line todavía no existen

Concha Edo, Universidad Complutense de Madrid

(La 1ª versión de este texto fue presentada en el VI Congreso de la Sociedad Española de Periodística, celebrado en Madrid en 2000)

(versión revista de 2001)

En los pocos años que han pasado desde que el primer periódico decidió hacer una edición especial para Internet  ( [1] )  se ha producido un crecimiento constante en todo el mundo del número de cabeceras que han optado por incorporarse al espacio cibernético y también de los lectores que se informan a través de las variadas ofertas de la  red, aunque con  unas cifras globales de uso que son muy diferentes para cada país y en las que está a la cabeza, con gran diferencia todavía, Estados Unidos.
Uno de los trabajos sobre la concentración de usuarios que ofrece más garantía, entre los frecuentes muestreos publicados, asegura que, en 1998, el 84,4 por cien eran norteamericanos ( [2] ). Otros estudios posteriores  han reducido ese porcentaje hasta aproximarlo casi a la mitad del total en el año 2000 ( [3] ), y en mayo de 2001 -con una cifra global que casi alcanza los 400 millones en todo el mundo-, los internautas estadounidenses son  120 millones y Europa supera ya los 100 ( [4] ).
Dentro de nuestro continente sólo los países nórdicos llegan a tener un nivel de utilización del espacio digital que se pueda comparar al que han conseguido los norteamericanos (
[5] ), y la realidad española en estos momentos es que ocupamos todavía un lugar poco relevante en el entorno interactivo europeo, con sólo tres países  por detrás  de nosotros.  Pero  esta  posición  va  también unida al  hecho de que son cada vez más las personas que navegan por la red: con datos recientes en la mano se comprueba que llegan a  6.890.000 los ciudadanos que tienen acceso a Internet, lo que representa el 19,8 % de la población de nuestro país( [6] ).
En este territorio abierto -que nació con una clara  vocación científica pero que ahora ha pasado a ser, sobre todo, comercial ( [7] )  y lúdico ( [8] )-, están consolidando día a día  su espacio los distintos medios de comunicación escritos y audiovisuales. Y con la aplicación de las nuevas tecnologías a los sistemas de redacción y edición,  todos  ellos  han pasado y seguirán pasando por una serie de cambios,  tanto  en su aspecto externo como en la estructura y en la presentación final  de los contenidos.
Todas estas novedades auguran  un  futuro  periodístico  y  comunicativo extremadamente atractivo,  siempre que  se resuelvan a tiempo las dificultades que han  planteado la dinámica informativa y el ejercicio profesional en sus  primeros pasos por la red de redes. Unos problemas que cobran especial importancia en lo que se refiere a los planteamientos éticos y a la defensa del periodismo de calidad ( [9] ) .


Nuevos hábitos de lectura

De todas las posibilidades que ofrece el periodismo en su conjunto es la prensa  escrita la que mejor se ha adaptado hasta ahora al entorno digital. En gran parte porque el proceso de edición de los periódicos en papel está digitalizado desde hace años, pero los resultados de un estudio reciente demuestran, además, que el texto es el primer punto de referencia para los lectores on line.  Frente al ordenador,  miran los encabezamientos de las noticias antes que cualquiera de los elementos gráficos para elegir así  el  artículo que quieren leer, utilizando un modelo de lectura en el que se produce justamente lo contrario de lo que ocurre con los formatos tradicionales ( [10] ).
En este  nuevo contexto  informativo,  con el que ya es ineludible  contar cuando se habla de medios de comunicación,  y  de acuerdo con  los datos más recientes, en el año 2000 el  número  total de diarios en español  con  edición digital era de 403,  de  los  que  81 se publican en España  y,  de  ellos,  68  son  de información general ( [11] ). Estos más de cuatrocientos títulos representan cerca del cincuenta por cien de las 930 cabeceras editadas en lengua española en todo el mundo, y es importante destacar, a pesar de que el inglés es el idioma más utilizado en la red, que esta cantidad está muy por delante de los 134 diarios en alemán, 133  en portugués  y  98 en francés que se publican on line,  en todo el mundo,  en las mismas fechas ( [12] ).
Sin embargo, las ediciones en papel de los periódicos no parecen haber sufrido demasiado las consecuencias de esta situación (
[13] ). En Estados Unidos las tiradas de los grandes diarios siguen creciendo y también aumenta la oferta editorial de cada uno para sus lectores, y los que van perdiendo mercado son aquellos que no cuentan con los medios que requieren las demandas de la audiencia ( [14] ) en cuanto a calidad, suplementos y tecnología. Y el último informe del ABC (Audit Boureau of Circulation) demuestra que nueve de los diez mayores rotativos han aumentado las ventas.
El más leído sigue siendo USA Today, con 1,83 millones de ejemplares diarios, y le siguen The Wall Street Journal, con 1,81, Los Ángeles Times, con 1,15, y The New York Times, con 1,14 millones. Y, a  pesar de los millones de estadounidenses que acceden al cada día al espacio cibernético, los dos primeros han aumentado en los últimos seis meses  un 1,1 por cien, el tercero alcanza un porcentaje del 5, y el cuarto un 3 por cien ( [15] ).
Por lo que se refiere a España, la verdad es que , tras una bajada discreta en 1996, las cifras de difusión diaria vuelven a remontarse cada año hasta el actual (
[16] ), con un índice de lectura que está en 105,5 ejemplares por cada mil habitantes. Y, aunque esa cantidad está todavía lejos de los 456 de Finlandia, los 437,8 de Suecia, los 331,2 de Austria, los 318,1 del Reino Unido y los 217,6  de media de la Unión Europea -sólo se lee menos prensa en Italia, Portugal y Grecia-, lo cierto es que los acontecimientos políticos y sociales de las últimas décadas  han producido en nuestro país alteraciones cuantitativas de la difusión mucho mayores que la llegada de Internet ( [17] ).
A esto hay que añadir que los lectores de prensa digital son mayoritariamente lectores de diarios en papel -dos de cada tres aseguran serlo- y muchos de ellos leen las dos versiones del mismo periódico, con unos datos globales de lectura de prensa en la pantalla para todas las cabeceras de 237.000 personas cada día. En el caso de  las revistas las cifras son más discretas: 52.000 personas las buscan a diario, y sólo son 20.000 las que escuchan la radio  ( [18] ) que, lentamente, va incorporándose a la red ( [19] ).
En cuanto a la televisión, poco más se puede añadir por ahora: en Francia existe Canalweb,  una productora danesa se ha hecho cargo de Tvropa ( [20] ) y en España RTVE emitirá los programas convencionales a través de su propio portal que incluirá, además, distintos servicios ( [21] ), y hay empresas como QuieroTV que dan sus primeros pasos. Y entre las novedades recientes están la que ofrece Estados Unidos, con una dirección -RecordTV ( [22] )- que permite grabar programas de televisión en su formato original y, con otros matices distintos,  Tvradicam.com. ( [23] ) que emite contenidos alternativos y puede calificarse como un verdadero  fanzine audiovisual.

Los efectos del cambio

La posibilidad de acceder al espacio digital desde el televisor  y la repercusión que pueda tener la interactividad en las cuotas de pantalla, así como la implantación  del teléfono móvil como acceso a la red y sus consecuencias,  son algunas de las cuestiones pendientes. Y están en función de la velocidad con la que lleguen al mercado los avances tecnológicos y de la reacción de los usuarios a la hora de elegir el medio que más les guste o el que más utilidad les garantice.
Existen ya varios  proyectos televisivos recientes que van en esta línea  como el  de la compañía WebTV ( [24] ), que utiliza la red para ofrecer al telespectador una programación  personalizada  y le permite navegar desde el televisor, o la televisión digital por satélite, una de las novedades más interesantes ( [25] ). Y por lo que se refiere al teléfono móvil, la actual tecnología WAP (Wireless Application Protocol/ Protocolo de Aplicaciones Inalámbricas) ( [26] ) que permite utilizar el correo electrónico, distintos servicios comerciales e, incluso,  leer algunos periódicos  ( [27] ), dará  paso  a finales  del año 2002 a la navegación completa por Internet, incluyendo imágenes y sonidos.
Toda esta expansión  digital ha puesto en las pantallas unos medios aparentemente distintos a los que desde siempre estamos habituados a ver, con una serie de cambios que afectan en parte al fondo pero, sobre todo, a la forma y a las distintas  maneras de presentar la información ( [28] ). Unos y otros van ofreciendo un diseño que cambia con facilidad y que trata de ser ágil y, además, gráficos, fotos, vídeos, sonido y la  posibilidad de comunicarse sobre la marcha con el medio, con los periodistas, con otros lectores o con los protagonistas de la noticia sin tener que abandonar la pantalla.
Es más que probable que las cifras de consumo sigan creciendo en los próximos años ( [29] ) y hay cabeceras que han conseguido resultados satisfactorios en el desarrollo de su estrategia informativa on line ( [30] ). Incluso se facilita ya la acreditación para periodistas de Internet ( [31] ), se van a crear unos premios Pulitzer especiales ( [32] )  y, aunque todavía no está claro cual es el modelo o cuales son los modelos a seguir,  una agencia tan emblemática como Associated Press (AP) va a incluir entre sus servicios noticias de News.com, una página de Cnet, dando así una oportunidad más al periodismo digital ( [33] ).
Y en lo que si hay coincidencia es en el riesgo que suponen para el periodismo de calidad los grandes portales, que ofrecen la información de actualidad entre otras muchas cosas y acumulan el mayor número de visitas  y,  por  lo  tanto, la mayor  inversión publicitaria de la red ( [34] ).
Pero el papel sigue, por  ahora, inamovible. Hasta el punto de que nombres con tanto  éxito en el espacio digital como Yahoo!, están buscando nuevos ingresos por medio de una revista convencional -Yahoo! Internet Life- que ya ha alcanzado los 750.000 ejemplares. También Expedia.com, la página de viajes de Microsoft, va a lanzar Expedia Travels; la web de subastas eBay, una de las más importantes, edita eBay Magazine y E*Trade, otra web de peso dedicada a la Bolsa y al mundo financiero, ha lanzado recientemente E*Trade Magazine ( [35] ).

Un medio multimedia

Es evidente que las posibilidades de la red son muchas y su capacidad cada vez mayor, pero en el día a día de las noticias poco ha cambiado. En un primer momento fueron los periódicos y las revistas los que dieron el primer paso reproduciendo íntegros, como se ha recordado en las primeras líneas de este trabajo, los contenidos de las  versiones publicadas en papel. Y sólo después de un tiempo comenzaron a adaptarlos a las exigencias de  la  pantalla  del ordenador,  mientras que las emisoras de radio presentan todavía los programas sin variación alguna.
Poco a poco se han incluido en las páginas de los diarios contenidos pensados para la edición digital y se han  mejorado la presentación, la rapidez para ofrecer la información de última hora, los servicios a los lectores, la calidad de los gráficos y las fotos, los enlaces o la cantidad de información. Incluso se añaden animación y sonido ( [36] ). Si en los comienzos sólo se contaba con un mínimo de periodistas, ahora ya se han formado redacciones más numerosas que trabajan sólo para la red, existen medios exclusivamente digitales,  se hacen varias actualizaciones de las noticias y, desde octubre de 1999, El Mundo hace una edición completa a las seis de la tarde siguiendo la pauta de algunos periódicos estadounidenses.
Pero eso es todo. Ni se ha llegado a crear un medio nuevo, ni existe un lenguaje nuevo que saque todo el partido posible al hipertexto o a la interactividad, ni se cuenta todavía demasiado con las intervenciones de los lectores, ni se ofrece -en este caso por las limitaciones que marca la tecnología- material audiovisual de calidad, ni las noticias se dan, como exige el espacio cibernético, en tiempo real. Todavía no existen los nuevos medios, los medios multimedia.
La última novedad en el sector ha corrido a cargo del grupo Tribune y es la conversión de los periodistas en “proveedores de contenidos” que sirven tanto para periódicos como para  radio, televisión e Internet.  Es el periodismo multimedia, que exige escribir la noticia para la red, con las correspondientes actualizaciones, y contar las cosas en los medios audiovisuales, compartiendo toda la información y renunciando a las exclusivas y a los reportajes en profundidad por la carencia de tiempo para hacerlos.
Este sistema ha producido algunos cambios en las redacciones -que cuentan con un pequeño estudio de radio-televisión para transmitir en directo- pero, sobre todo, un considerable ahorro para las empresas que lo consideran un buen modo de trabajar en equipo que facilita la cobertura de la información ( [37] ), a la vez que dificulta el buen periodismo . 
Hay científicos que aseguran que no podemos vivir ahora con mentalidad del siglo pasado ( [38] ) y predicen un futuro cercano en el que se producirá la conjunción perfecta entre mundo real y el virtual ( [39] ) y podremos poner en juego no sólo la vista y el oído sino también el olfato ( [40] ) y el tacto ( [41] ). Pero, de momento, los medios de comunicación on line se parecen mucho a los ya conocidos escritos y audiovisuales y, además, en la red sigue existiendo un problema que no se acaba de solucionar: su vulnerabilidad, que volvió a  ponerse de manifiesto con el virus I love you y la especial atracción que mostó por los archivos de imágenes y sonido de distintos periódicos de todo el mundo ( [42] ) y se recrudece con todos los demás que aparecen periódicamente en la red, así como con las irrupciones no deseadas en páginas aparentemente seguras.




Referencias bibliográficas

DÍAZ NOSTY, Bernardo (2000): Informe anual  de  la  comunicación 1999-2000.  Estado y tendencias de los medios en España, Zeta, Madrid.

EDO, Concha (2000 a): “Los periódicos  se instalan  definitivamente en  la  red”, en  Derecho yOpinión, nº 7, Universidad de Córdoba.

- (2000 b): “Las ediciones digitales de la prensa: los columnistas y la interactividad con los lectores”, en  Estudios sobre  el mensaje  periodístico 6, Universidad  Complutense.

- (1999): “Las revistas e Internet como soportes del periodismo especializado y la divulgación”, en Estudios sobre el mensaje periodístico, nº 5, Universidad Complutense.

 (1994): La crisis de la prensa diaria. La línea editorial y la trayectoria de los diarios de Madrid, Ariel, Barcelona.

LAIME, Marc (2000): “Nouveaux barbares de l’information en ligne”, en Le Monde diplomatique, París, nº de julio. 

MARTÍNEZ ALBERTOS, José Luis (1999):  “La vigencia  del periodismo escrito frente  a los medios  interactivos”,  Discurso  de  investidura  como  Doctor  Honoris causa de la Universidad de San Martín de Porres, Lima.

          -  (1997):  El ocaso del periodismo, CIMS, Barcelona.        

RAMONET, Ignacio (2000): “Nouvelle économie”, en Le Monde diplomatique, París, nº de abril.

- (1998): Internet, el mundo que llega. Los nuevos caminos de la comunicación  (editor), Alianza, Madrid.



[1] La primera edición específica para Internet la hizo el diario San José Mercury Center, de California, que se instaló en la red en enero de 1995. Desde 1993 publicaba a través de  America  On  Line  sin limitarse a reproducir exactamente  sus páginas en papel  sino ya  teniendo  en cuenta  las posibilidades interactivas de las nuevas  tecnologías.  Antes,  The Chicago Tribune  reproducía  el diario  tradicional, sin añadir ni quitar nada, desde 1992, también en AOL.

[2] Esta cifra corresponde a una investigación realizada  por el Instituto de Tecnología  de Georgia  y  el Graphic Visualization &Usability Center’s, con la colaboración del World Wide Web Consortium.

[3] El  World Watch Institute,  por ejemplo,  aseguraba en 1999 que los accesos estadounidenses representaban el 52 % (El Mundo, 16 de febrero de 2000).

[4] Los porcentajes se reparten ahora así: 34% EEUU, 29% Europa, 16% Asia (sin Japón), 10% Japón y 11% el resto del planeta. Y para el 2005 se prevén cerca de 1.000 millones de personas utilizando la red (Baquía, 31 de mayo de 2001).

[5] Suecia ofrecía en 1999 un porcentaje del 39,6 % seguida por Dinamarca, Holanda, Finlandia  y  Luxemburgo (El País, 27 de julio de 1999).

[6] Estos datos  corresponden  al sondeo  del  Estudio General de  Medios (EGM) de los meses  febrero-marzo de 2000.  Desde el otoño  pasado,  el aumento  del número de  personas  que se conectan  por lo menos una vez a la semana ha sido de 755.000.  Y por comunidades autónomas, Cataluña tiene el  porcentaje  mayor del total de conexiones con un 14,7 %.  Después  le siguen Madrid, con  el  10,9 %  y  Aragón, con el  10,1 %.  La franja de edad que más utiliza los servicios de Internet está entre 25 y 34 años y concentra al 35,7 % de los internautas.

[7] En I. Ramonet (2000), este autor alerta sobre las posibles consecuencias del crecimiento hasta ahora vertiginoso de un mercado en el que, a medio plazo, apenas  sobrevivirá  el  25 % de las empresas:  “ On considère que le nombre  d’utilisateurs d’Internet, estimé  à 142 millions en 1998, devrait atteindre d’ici à  2003 les 500 millions... La grande bataille à  venir verra  s’affronter  les entreprises américaines,  européennes  et  japonaises pour contrôler les réseaux, et pour dominer le marché des images, des données, du son,  des  consoles de jeu, bref, des contenus  Mais aussi, voire surtout, pour s’imposer dans  le commerce électronique. Internet s’est transformé  en  une  vaste galerie  marchande.  Embryonnaire  en 1998, avec  à  peine  8  milliards  de  dollars d’échanges, le commerce électronique devrait atteindre les 40 milliards en 2000 et dépasser les 80 milliards en 2002 (...) A peine 25% des entreprises de la Net-économie devraient, à moyen terme, survivre. De hautes autorités financières n’héssitent plus à mettre en garde les épargnants".   

[8] Puede leerse un análisis crítico de las diferentes opciones, posibilidades e incertidumbres que ofrece a  los usuarios la red en  I. Ramonet (1998) y en C. Edo (2000 a).

[9] Existe un trabajo sobre  los peligros que se ciernen sobre el periodismo si no se insiste lo suficiente en la profesionalidad del periodista y en la importancia de trabajar con unos criterios éticos claramente definidos, en  J.L.M. Albertos (1997).

[10] Este estudio sobre los nuevos hábitos de lectura de prensa  on line ha sido realizado por el  Poynter  Institute  y  por la Stanford University, que lo hicieron público en el año 2000,  y  demuestra que  Internet cambia los usos habituales:  hace diez años hicieron un muestreo semejante con la prensa escrita  y  eran  los  elementos visuales  lo primero que miraban los lectores. En marzo de 2001 fue presentado en la Universidad de Coimbra, en el I Congreso Internacional sobre Periodismo e Internet, por el coordinador del trabajo en el Poynter Institute.                                                                                                                              

[11] El país  de  habla hispana que cuenta con más diarios en la red es México, con 100. En segundo lugar está España y, después, Argentina con 64, Venezuela con 23, Perú con 20, Colombia con 19, Chile con 14, Estados Unidos con 12, Ecuador y Uruguay con 10 cada uno y los demás con 9  o  menos, hasta llegar a Cana-dá, Israel y Puerto Rico que sólo tienen uno para cada país. En  el nuestro,  los periódicos digitales más leídos son  El País,  El Mundo,  Marca,  ABC,  Expansión,  Cinco Días, La Vanguardia y El periódico. El número de diarios de otros países se puede encontrar en B. Díaz Nosty (2000).

[12] El País

[13] Se hace un estudio detallado del sector de las revistas en C. Edo (1999).

[14] El secreto está, para los expertos, en saber lo que quieren los lectores. Stuart Garner, presidente del grupo de prensa Thomson Newspapers, de Estados Unidos y Canadá, asegura que el elemento principal en esta cuestión es  la utilidad  y  que “el negocio de los diarios es muy simple: escribes lo que la gente quiere leer y te recompensan comprándote el periódico”. Y lo que quieren leer los norteamericanos, de acuerdo con un estudio realizado por la Asociación Americana de Periódicos, es todo aquello que afecte directamente a su vida cotidiana y  les ayude a entender la sociedad en la que viven  y, concretando los temas,  la educación, la economía, la sanidad y las pensiones, además de saber sacar partido a las nuevas tecnologías y a Internet (La Vanguardia, 4 de mayo de 2000).

[15] Los 799 diarios contabilizados por ABC han aumentado una media del 0,2 por cien, pero se ha producido una bajada del 0,6 los domingos. También hay auditores independientes que consideran  poco representativo este crecimiento, porque la población aumenta a mucha más velocidad.  

[16] En 1989 las ventas totales de  prensa diaria  en España eran de  3.330.258  ejemplares por número, una cantidad que va creciendo hasta los 4.236.749 de  1995,  baja a  4.142.825 en 1996  y vuelve a subir desde entonces hasta llegar a los 4.280.000 ejemplares de 1999 (cfr. B. Díaz Nosty, op. cit.).

[17] Para un estudio  más completo de  la prensa española y, en concreto, de los diarios  de mayor  difusión, cfr. C. Edo (1994).

[18] Estos datos corresponden al control de febrero-marzo de 2000 de  la  AIMC (Asociación para la Investigación de Medios de Comunicación.     

[19] Se puede encontrar información sobre  la radio digital  en algunas direcciones,  pocas aún, entre las que se  pueden incluir dos  españolas  - www.elmundo.es  www.rtv.es/dab/ -,  www.bbc.co.uk/digitalradio,  de la  BBC, y  www.ukdigitalradio.com , de Digital One, inglesas , y  www.ntl.com/guides/digitalradio/dummies , www.eurekadab.org/  www.worlddab.org/.

[20] El Mundo, 21 de marzo de 2000.

[21] ABC, 19 de febrero de 2000 y El Mundo, 6 de abril de 2000

[22] Funciona como cualquier  vídeo  y  se  pueden grabar  y  reproducir  programas  desde  la dirección www.recordtv.com .

[23] La dirección es www.tvradicam.com

[24] Esta empresa fue comprada por Microsoft en 1997.

[25] El  DISHPlayer 500, de Dish Network, es un sistema de televisión digital  por satélite de 500 canales que permite hacer una pausa en los programas, grabar, reproducir inmediatamente y repetir las secuencias. Otras empresas que ofrecen esta tecnología son  TiVo  y  ReplayTV (La Vanguardia, 24 de marzo de 2000).

[26] En www.wapforum.org  y www.wap.net hay información sobre el protocolo WAP.

[27] En España, y desde los primeros meses del año 2000, el diario ABC y el periódico exclusivamente digital Vilaweb ya permitían esta posibilidad. Después se fueron sumando las principales cabeceras

[28] Los cambios que se han llevado  a cabo  hasta  este momento  en los medios digitales,  y  los que se pueden prever con los datos actuales en lo que se refiere la estructura, la  relación con los lectores, el espacio y  los contenidos se pueden encontrar en C. Edo (2000 b). 

[29] En el  último informe anual elaborado  por  Veronis, Shuler & Associates  se asegura  que Internet estimulará el uso de los medios -en el año 2003  será de 10 horas diarias- y  el gasto  de los estadounidenses, e Internet  - el 5,4 % del total -  hará que aumente el gasto  en  libros, música  o  televisión  (La Vanguardia, 2 de mayo de 2000). 

[30] Tres de los premios concedidos en febrero de 2000 por Editor&Publisher, en  New Orleans,  han sido para  la  web chicagotribune.com, otros tres para washingtonpost.com y  uno para la versión digital de Financial Times, ft.com.

[31] La Casa Blanca ha reconocido por primera vez la existencia de los periodistas dot.com - así llaman a los medios digitales - y les facilitó la acreditación para acompañar a Clinton en uno de sus viajes. En total fueron trece los que la consiguieron (El Mundo, 21 de abril de 2000).

[32] La Escuela de Periodismo de la Universidad de Columbia y la Online News Association (ONA) han hecho pública su  intención de convocar estos galardones también  para  Internet y  trabajos  en inglés  de cualquier parte del mundo (ABC, 11 de mayo de 2000). 

[33] Los 1.500 periódicos abonados a AP recibirán cada día de cinco a diez artículos de News.com.

[34] Estar fuera de ese circuito puede significar estar marginado del mercado  de la  información on line porque los portales pueden suplantar a  los medios y  difundir los contenidos informativos de las grandes cabeceras. Cfr. M. Laime (2000).

[35] La Vanguardia, 28 de abril de 2000.

[36] La Vanguardia  y  El Mundo, entre otros, incluyen esta posibilidad en  algunos  reportajes  y  ABC y otros diarios también ofrecen algún vídeo. Y es frecuente que los periódicos muestren distintos tipos  de  imágenes  en movimiento en los banners publicitarios.

[37] Tribune tiene 22 canales de televisión, cuatro cadenas de radio, cuatro periódicos y varios sitios en Internet (El País, 28 de marzo de 2000)

[38] Howard Frank, ex director de Tecnologías de la Información del Gobierno de EEUU (El País, 13 de abril de 2000).

[39] Es también Frank, que participó directamente en la creación de Arpanet  - la red que dio  paso a  Internet - quien dice que en diez años será  mil veces más potente y que llegaremos a ser parte de ella, “podremos  proyectarnos como  hologramas en tres dimensiones  y  sentir a  distancia”  (La Vanguardia, 23  de  marzo de 2000). 

[40] Una empresa de Georgia (EEUU),  Trisenx,  ha anunciado el lanzamiento de un programa que permite descargar aromas al ordenador y AromaJet  y  DigiScents también desarrollan la producción de olores artificiales.  Pero se  han producido críticas  a todo esto porque consideran que el olfato no es sólo producto de la química y puede perder su sentido fuera del contexto adecuado.

[41] Michael McCoy, diseñador industrial de Chicago, afirma que “será posible transmitir por Internet sensaciones táctiles, de modo que los compradores puedan comprobar si la verdura está fresca” (Clarín, 2 de enero de 2000)

[42] Uno de los motivos de la expansión del virus fue la atracción de los archivos que se  utilizan para  trabajar con material gráfico. Y en aquella ocasión atacó los sistemas  informáticos de  las ediciones para Europa  y  Asia del diario  The Wall Street Journal,  el alemán Handelsblat,  TV2  de Dinamarca, Time Warner, al grupo Alex Springer, editor de Bild, al servicio OnLine de la BBC  y  al grupo editorial Grüner und Jahr, entre otros. Y en España se pueden añadir El País, El Periódico de Catalunya,  El Correo, Tele 5,  Canal Plus  y  la Cadena SER (El País, 5 de mayo de 2000).